Por este motivo, es importante hacer referencia al informe más reciente emitido por el INEGI o Instituto Nacional de Estadística y Geografía, en el cual se especifican los datos del Índice Nacional de Precios al Consumidor. Así pues, es posible evidenciar que, en el 2022, la tasa de inflación anual alcanzó el 8.7%, una cifra que no se había presentado desde los años 2000, por lo que está representa una alerta tanto para los expertos como para los consumidores.
Por su parte, esta es solo una tasa promedio, lo que quiere decir que en otros sectores puede ser incluso mucho más elevada, tal como en el caso de los productos agropecuarios, que reflejan un incremento en los costos de 14.90%.
Todo ello quiere decir que, desde la perspectiva del consumidor, los precios de los productos serán cada vez más elevados, mientras que los sueldos y salarios pueden mantenerse al mismo nivel, por lo que el poder adquisitivo de cada uno de los ciudadanos es menor ante este tipo de situaciones.
Por estos motivos, esta puede ser una problemática alarmante para cualquiera y por ello, queremos enseñarte cómo combatir la inflación desde la posición del consumidor, evitando de este modo que la incidencia de la misma pueda afectar demasiado su cotidianidad.
Qué hacer para combatir la inflación
Si ya has podido visualizar algunos de los efectos de la inflación y eres consciente de este problema, seguramente estás pensando en buscar alternativas para evitar que esto te afecte demasiado.
Lo primero que debemos tener en consideración, es que es bastante posible que este problema se presente con mayor fuerza a inicio del 2023 y que sus efectos duren al menos unos meses.
En este sentido, muchas personas han comenzado a preguntarse: ¿Es momento para empezar a ahorrar? ¿Es mejor invertir para evitar la devaluación?, ¿Cuáles son las acciones adecuadas para evitar que la inflación tenga grandes repercusiones en nuestra cotidianidad?, ¿Será buena idea pedir un préstamo?, ¿Cómo sobrevivir a la inflación y a las deudas al mismo tiempo?
Sin duda, el tema de la inflación tiene demasiadas aristas y muchas preguntas por resolver, por ello, queremos proporcionarte las herramientas que necesitas para que puedas tomar decisiones acertadas frente a la inflación que se vive actualmente en el país.
Cambiar los hábitos de consumo
El principal efecto de la inflación para los compradores y consumidores, es que los precios se elevan y se vuelven prácticamente inalcanzables si los comparamos con su valor anterior. Los motivos por los cuales un producto puede subir de precio son múltiples, pero en general, podemos decir que la situación económica que se presenta en esta oportunidad está fuertemente vinculada con la pandemia del Covid-19, la cual ha generado consecuencias en todo el mundo, no solo en el sector de la salud, sino también a nivel económico, social y político.
Pero, ahora que la inflación es un hecho, lo mejor que podemos hacer es generar ciertos cambios en nuestras formas de consumo para evitar que su efecto sea demasiado agresivo con nuestros bolsillos. Así pues, los expertos recomiendan que, los primeros pasos para combatir la inflación están relacionados con los cambios de hábitos, dentro de los cuales podemos mencionar
- El consumo exclusivo de marcas en específico, solo por hábito y no por necesidad.
- La comparación de precios y el establecimiento de la relación precio/calidad al momento de comprar.
- La búsqueda y selección de productos que cumplan con estándares de calidad y rendimiento a buenos precios.
- Realizar compras inteligentes basadas en las necesidades y la utilidad.
- Evitar compras compulsivas e innecesarias.
- Mantener al día el pago de servicios, estableciendo relaciones adecuadas en lo que respecta al presupuesto y a los gastos fijos e indispensables.
Ante todo, lo más importante es asegurarte de cubrir siempre los gastos fijos o básicos, pagar las cuentas de servicios, cuotas de deudas, cubrir gastos de alimentación, entre otros. De este modo, será mucho más sencillo establecer un presupuesto para gastos adicionales que incluyen recreación, ocio, ropa, entre otros productos secundarios.
Invertir o ahorrar en épocas de inflación
La mayoría de los consumidores se debaten entre estas dos opciones, si saber a ciencia cierta si es mejor invertir o ahorrar frente a un escenario de inflación. Por ello, queremos explicarte cual es nuestra postura al respecto.
Es cierto que ahorrar es un hábito financiero saludable, el cual te permitirá hacer inversiones más importantes a futuro o costear gastos en caso de emergencia. Pero, aunque esta es una gran alternativa, puede que en época de inflación no sea la mejor opción.
Todo ello si consideramos que, al guardar el dinero, este sólo permanece allí sin posibilidad de multiplicarse o aumentar su valor, sino que, al contrario, podría disminuir frente a una devaluación de la moneda, que podría resultar como consecuencia del mismo fenómeno inflacionario.
Es por este motivo que los expertos recomiendan que, en estos casos, lo mejor es hacer inversiones y poner a trabajar el dinero para que aumente su valor, ya sea en activos o en capital, de cualquier modo, lo importante es hacer una inversión que realmente valga la pena y que garantice un alto índice de retribución al futuro, de allí que sea necesario que evalúes con detenimiento cada una de las alternativas posibles.
Si de igual manera, eres de las personas que prefieren ahorrar para asegurar sus finanzas a futuro, la recomendación que te damos es que te asegures de hacerlo en una moneda fuerte o en activos cuyo valor de mantenga a pesar de las variaciones que pueda generar la inflación, ya que, de lo contrario, se corre el riesgo de perder este esfuerzo. Esto es de especial importancia si consideramos que, tal como explican algunos expertos, la opción de invertir no está disponible para todo el mundo, por ejemplo, para aquellas personas que tienen demasiadas deudas, lo mejor es salir de estas antes de adquirir una nueva para poder hacer inversiones importantes. De lo contrario, esto podrá generar estragos en el historial crediticio del usuario.
Solicitar o no préstamos y créditos
Pasemos ahora a otro de los puntos más controversiales frente a una situación de inflación. Algunas personas consideran que, por la elevación de los costos, el contexto de inflación es ideal para endeudarse, ya que, cuando este panorama transitorio termine, será más sencillo pagar la deuda.
Además, otros afirman que es mejor endeudarse antes de que suban más los precios porque luego podría ser aún más difícil costear ciertos productos. Sea cual sea el caso, los especialistas afirman que, este no es el contexto adecuado para adquirir préstamos de consumo, a menos de que estés seguro de que puedes cubrir al menos el cargo mínimo en todo momento.
Esto se debe a que, si no estás en tu mejor momento económico, no tendrás presupuesto suficiente para cubrir las cuotas de créditos y préstamos, lo que hará que la deuda se acumule, generando intereses y, por ende, que sea cada vez más difícil de pagar.
No obstante, si se trata de una empresa o negocio en crecimiento y se pretende invertir en la optimización de los procesos para mejorar la calidad de los productos y servicios, solicitar préstamos puede ser la opción adecuada, en especial si existen garantías de que, a futuro, será posible costear la deuda adquirida.
Por este motivo, se recomienda solicitar préstamos a largo plazo, con un total de 12 o 24 meses para pagar, aligerando de este modo los cargos y cuotas que de otro modo podrían ser impagables.
Qué hacer si tienes una deuda
Si antes de que esta situación nos abordara ya habías adquirido una deuda, lo que debes hacer es pagarla de inmediato. Haz tu mejor esfuerzo para salir lo antes posible de esta para que evites el aumento de las cuotas, ya que, de lo contrario, es posible que debas pagar aún más de lo que solicitaste al inicio del contrato.
Para ello, lo más recomendable es crear un presupuesto y un plan de pago que te permita cubrir con tus necesidades básicas y pagar en cómodas cuotas la deuda pendiente, de esta forma, evitas que se acumule y que se convierta en un problema mucho más grande a futuro.